martes, 8 de noviembre de 2016

EJERCICIO 6

Sustenta de forma  oral y escrita obras literarias asumiendo una actitud crítica ante las intervenciones de sus compañeros.

El autor de dicha obra es Alejandro Dumas ( padre; Villers-Cotterêts, Francia, 1802 - Puys, id., 1870) Novelista francés. Hijo de un general del ejército francés que dejó a su familia prácticamente en la ruina al morir, en 1806, Alexandre Dumas tuvo que abandonar pronto sus estudios. Llegó a París en 1823, tras una primera experiencia como pasante de abogado, lleno de ambiciones literarias. Gracias a su puesto de escribiente para el duque de Orléans, que obtuvo por recomendación del general Foy, consiguió completar su formación de manera autodidacta.
Desde 1825, editó poemas y relatos largos, y representó vodeviles en teatros de variedades, pero el verdadero inicio de su carrera como dramaturgo se produjo en 1829, con Enrique III y su corte, primera manifestación de la nueva generación literaria romántica, anticipándose un año al Hernani, de Victor Hugo. Antony, en 1831, marcó los principios de una etapa de creación infatigable de dramas, tragedias y melodramas, casi todos de exaltación de la historia nacional de Francia.
Gran admirador de Walter Scott, a partir de 1832 escribió también novelas históricas, aprovechando el auge del género propiciado por su publicación por entregas en los periódicos. A pesar del poco éxito de sus primeras novelas, la aparición de Los tres mosqueteros, en 1844, significó su salto a la fama. Las sumas ingentes de dinero que se le ofrecían, dada la creciente demanda de sus novelas por parte del público, motivaron una verdadera explosión en la producción de Dumas. Trabajando incontables horas al día, y con la ayuda de varios colaboradores, entre los que destacó el historiador Auguste Maquet, con quien trabajó de 1839 a 1851, llegó a producir ochenta novelas, de desigual calidad. La mayoría de ellas pertenecen al género histórico o al de aventuras, en el que destaca sin duda El conde de Montecristo.
La escasa profundidad psicológica de los personajes se ve ampliamente compensada por una exuberante inventiva a la hora de crear las intrigas, y por el perfecto dominio de los diálogos, siempre ágiles y vivaces. Sin duda, éste fue el motivo de que sus obras fueran frecuentemente trasladadas al teatro. Con este fin fundó en 1847 el Théâtre Historique, en París, empresa que cuatro años más tarde quebró a causa de las deudas contraídas, a pesar del éxito obtenido.
La vitalidad enorme de Dumas le llevó a probar todos los géneros de la literatura y, si bien es cierto que sus ensayos históricos no tuvieron mucha relevancia, la serie de sus Impresiones de viaje (1835-1859), en cambio, lo convirtió en el primer maestro del gran reportaje. Realizó una breve incursión en el universo político; fue nombrado capitán de la Guardia Nacional parisina, pero se enemistó con Luis Felipe, y, tras un estrepitoso escándalo en las Tullerías, rechazó el nuevo régimen y volvió a la literatura. Tras dos fracasos electorales sucesivos, en marzo y junio de 1848, en 1851, huyendo más de sus acreedores que de Luis Napoleón, se exilió en Bélgica, donde redactó sus apasionantes y pintorescas memorias, y compuso nuevas novelas de aventuras.
Regresó a Francia en 1853 y fundó la revista satírica El mosquetero, que se transformó, en 1857, en El Monte-Cristo. Ante la continua censura de Napoleón III, abandonó de nuevo Francia y se sumó a la expedición de Garibaldi en Sicilia, en 1860. Se encargó de comprar armas para el revolucionario italiano y se instaló, durante cuatro años, en Nápoles, donde Garibaldi lo nombró conservador del museo de la ciudad. Enemistado con el cardenal Francesco Zamparini, fue expulsado por los napolitanos, e impulsó en París nuevos intentos periodísticos, que abortaron al poco tiempo.
Arruinado, vivió los últimos años de su vida a costa de su hijo Alexandre Dumas también escritor, y de su hija, Madame Petel. Pretendía haber escrito más de mil doscientas obras, y, aunque sin duda exageraba la cifra, dejó unos trescientos libros y numerosísimos artículos, que hicieron de él uno de los autores románticos más prolíficos y populares de Francia.

  • Redacta un texto dramático de tres párrafos donde narres la parte más importante de la obra, emplea criterios gramaticales como concordancia, cohesión, continuidad en el género, numero, significados denotativos, connotativos, acento, puntuación y ortografía.
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25 comentarios:

  1. la parte mas importante es prender a querer a los demás también la parte mas importante es fue cuando arnnaggan muere y supo que tiene amigos y hermanos el se despide diciendo el nombre delo otros amigos esto nos deja una enseñanza muy grande que hay que aprender a valorar lo que uno tiene y no dárselas de muy con los demás.

    otra parte fue cuando sacan al gemelo de la cárcel pero el rey malo no se da cuenta que el que tenia la mascara de hierro era su hermano fue muy chistosa la parte donde uno de los condes le enseña a bailar a uno de los gemelos.

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  2. Durante el baile de máscaras, Athos, Porthos y Aramis ponen en práctica su plan: secuestran al rey y lo sustituyen por Philippe. Desgraciadamente, éste pronto se delata al mostrarse mucho más compasivo y amable que su hermano, despertando así las sospechas de D'Artagnan, el cual, mientras Athos, Porthos y Aramis luchan por salir del palacio junto a Luis, ordena bloquear todas las salidas, cortándole así el paso a los mosqueteros. D'Artagnan usa a Phillippe como rehén y aunque Athos, Porthos y Aramis logran salir del palacio a salvo, Phillippe es capturado. Ya en palacio, el rey Luis maldice a su hermano y le condena a estar en prisión hasta la muerte y con la máscara puesta a pesar de que Phillippe suplica clemencia y pide que lo mate pero que no lo envíe a prisión. D'Artagnan y la reina Ana tratan de convencer a Luis de que le perdone pero no lo consiguen.

    Ya con Phillippe en la cárcel, se revela que D'Artagnan y la reina Ana han sido amantes y D'Artagnan comienza a pensar que se equivocó de bando. Athos, Porthos y Aramis acuden a la Bastilla a rescatar a Phillippe y se lo llevan, pero justo cuando iban a escapar, aparece D'Artagnan el cual les indica que el rey ha convocado a todos los mosqueteros y que la huida es imposible. D'Artagnan les guía hasta la salida, pero es entonces cuando aparece Luis con los mosqueteros y, a pesar de la heroica lucha de los cuatro amigos y de la reluctancia de los mosqueteros a luchar contra su capitán, quedan arrinconados en el extremo de un pasillo junto con Phillippe. Athos, Porthos, Aramis, D'Artagnan y Phillippe juran luchar hasta la muerte y al ver el tremendo valor de ellos, los mosqueteros de Luis se rinden y les muestran sus respetos. Luis ataca por sorpresa a Phillippe con un puñal, y al protegerlo, D'Artagnan recibe el impacto. D'Artagnan, moribundo, le dice a Phillippe que por primera vez en toda su vida, siente orgullo de padre; tras eso, muere.

    Poco después, los mosqueteros visten a Luis como Phillippe y viceversa, además a Luis le colocan la máscara y lo envían a prisión. Al día siguiente, todos los mosqueteros asisten al funeral de D'Artagnan, ya con Phillippe como rey. Phillippe le pide a Athos que sea su padre adoptivo ya que cuidó de él como nunca nadie lo hizo. Phillippe y su madre se quedan contemplando el horizonte con la bella ciudad de París de fondo, mientras un narrador cuenta que con el tiempo, Phillipe le concedió a Luis la absolución y lo dejó vivir en una casa en el campo donde la reina Ana lo visitaba a menudo.

    post: pido a Dios que después de casi dos horas creando este texto exhaustiva mente para que no me saliera con horrores de ortografía, haya quedado bien.

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  3. Para mi parecer la parte que más me llamo la atención fue el principio, al llegar la carroza ante la puerta primera de la bastilla, se paró a intimación de un centinela, y D´Artagnan, cuya mirada de lince lo veía todo y exclamo de repente.
    -¿Qué veo?
    -¿Qué veis amigo mío?-pregunto Athos con tranquilidad
    -mirad allá abajo
    -¿en el patio?
    -sí, pronto
    Veo una carroza; habrán traído algún desventurado como yo
    -apostaría que es el, Athos
    -¿Quién?
    -Aramis
    -¡Qué! ¿Aramis preso? No puede ser.
    Yo no os digo que este preso. Pues en la carroza nova nadie más.
    -¿Que hace aquí pues?


    -conoce el gobernador baisemeaux- respondió D´Artagnan con socarronería:-llegamos a tiempo.
    -¿para qué?
    -para ver
    -siento de veras este encuentro-repuso Athos-al verme, Aramis se sentiría contrariedad de Aramis
    -¿de qué manera?
    -haciendo lo que yo os diga, o más bien dejado que yo me explique a mi modo. No quiero recomendaros que mintáis, pues os sería imposible
    -¿entonces?
    -yo mentiré por dos, como gascón que soy
    Athos se sonrió


    Entretanto la carroza se detuvo al pie de la puerta de gobierno
    -¿de acuerdo?-pregunto D´Artagnan en voz queda
    Athos hizo una señal con la cabeza y junto con D´Artagnan, echó escalera arriba
    -¿Por qué casualidad?... dijo Aramis.-Eso iba yo a preguntaros,-interrumpió D´Artagnan
    -¿Acaso nos constituimos presos todos?
    -exclamo Aramis esforzándose en reírse.



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  4. ¡toma! ¿sois vos, señor de D” Atagnan? ---dijo fouquet
    Para servicios ---replico el mosquetero.
    Gracias.
    ¿venís para hacerme una crítica de las fiestas? Sois hombre ingenioso.
    No, señor.
    ¿Estorban, por ventura, vuestro servicio?
    Nada.
    ¿quizás estáis más alojado?
    Lo estoy a las mil maravillas.

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  5. ___ ¡mis caballos! ¡Mi esquife!
    El superintendente, al ver que nadie le respondía, se vistió con lo que encontró a mano.
    ___¡gourville!...¡gourville!...__grito el ministro.
    Gourville entro pálido y jadeante.
    ___¡partamos! ¡partamos! __ exclamo el superintendente al ver a su amigo.
    ___ Es demasiado tarde, __ contesto gourville.
    ___ ¡demasiado tarde! ¿por qué?
    ___¡Escuchad!
    Ante el palacio se oía el rumor de trompetas y tambores



    ___ por qué, siendo vuestro primer ministro, sire, no os dignáis a advertirme un país?
    ___ porque estáis enfermo y no quería causarnos fatiga alguna.
    ___Nunca me fatigan el trabajo y las explicaciones de, sire, y pues a llegado para mi el momento de pedir una explicación de mi soberano.
    ¿ sobre que?
    ___ Sobre las intenciones de mi majestad sobre mi Luis XIV se son rojo

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  6. ___gracias, señor D’Artagnan pero ¿Qué a sido del señor de Herblay?
    ___El señor de Herblay está a salvo, monseñor__ dijo una voz tras ellos,__ y mientras yo aliente o este libre, nadie le tocara un cabello.
    ___ ¡Ah! ¿Sois voz, señor fouquet? __ repuso Felipe sonriéndose con tristeza.
    ___Perdonadme, monseñor ___ replico el superintendente; ___pero el que acaba de salir de aquí era mi huésped


    Y Herblay conto la historia que ya conocemos.
    ___Era una grande idea, ___repuso el conde, ___ pero también una falta muy grande…
    ___De la que estoy castigado, ___ exclamo Aramis.
    ___Por eso no os revelare por eterno mi pensamiento.
    ___No temáis en manifestármelo.
    ___Pues bien, lo que habéis hecho vos es un crimen.
    ___Capital, lo sé; es crimen de lesa majestad.
    ___ ¡Pobre Porthos!___ dijo el conde.
    ___ ¿Qué queréis que haga? Ya os he dicho que el triunfo era seguro.
    ___Fouquet el hombre honrado.

    ___ ¿Dónde esta el señor de D´Artagnan, que no le han encontrado en el Louvre?
    ___Ha desaparecido, señor conde.
    ___¡Desaparecido!___exclamo Athos con sorpresa.
    ___Ya sabemos lo que esto significa, señor conde.
    ___No yo.
    ___Cuando el señor de D´ Atargnan desaparece, es siempre por alguna comisión o algún negocio.

    Atentamente : Maicol Piza

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  7. __ ¿Qué tal las piernas?
    __En este instante, muy bien
    __¡Lo veis¡ Todo conspira adarnos tranquilidad y esperanza. ¡Vive Dios! Porthos, todavía nos queda medio siglo de prósperas aventuras, y si yo llego a tierra de España, vuestro ducado no es tan ilusorio.
    __ Esperemos, __ dijo el gigante un poco contento por el nuevo calor de su con pañero. De pronto se oyeron gritos de: ¨¡A las armas!´´ cuyas voces penetraron en el aposento en que estaban los dos amigos y llenaron de sorpresas al uno y de inquietud al otro.


    __Mi querido Baisemeaux, por más que calce botas, soy sacerdote, y la caridad es para mí un deber más imperioso que el hambre y la sed.
    __¿Os empeñáis?
    __Os lo ruego.
    __¿Así, en lo mejor de la cena?
    __Sí, y vuestra acción será la bendición de vuestra mesa.


    __¡Como! ¡ en hombre de quien tanto hemos hablado ¡ ¡ el hombre sobre quien me recomiendan insensatamente que vele!
    __ya lo veis marchiali, __replico el inflexible aramis
    __confieso que no he entendido jota, monseñor.
    __sin embargo, debéis dar crédito a vuestros ojos.
    __!y decir que reza marchiali!
    __y en buena letra.




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  8. ___ Quiero ver al Gobernador___Repitió el Rey sin pestañear.
    ___¡Cuando! Os hará encerrar en el calabozo.
    ___¡Quiero verlo!¿oís?
    ___¡Ah diantre! ¿se os extravía la mirada? Pues me llevo vuestro cuchillo.


    ___Verdaderamente se parece al Rey, pero no tanto como vos ponderáis.
    ___¿De modo que no os dejarais engañar por la sustitución?___repuso Herblay.
    ___Si, a mí con esas.
    ___No tenéis precio, mi buen amigo. Vamos, ahora soltad a Seldón.
    ___Es verdad, se me había olvidado.
    ___ ¡Bah! Lo soltareis mañana.


    ___¿Luego mentía?
    ___En parte, pero no respecto de vuestro padre.
    ___¿Y mi madre?
    ___Esta muerta para vos.
    ___Pero vive para los demás. ¿no es así?

    ___Si, monseñor.
    ___ ¿Y yo estoy condenado a vivir en la oscuridad de una prisión? ___exclamo el joven mirando de hito a Herblay.
    ___Tal creo, monseñor, ___ respondió Aramis exhalando un suspiro.

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  9. -monseñor, dijo Baisemeaux,-marchiali es el preso a quien al otro día vino a visitar por manera tan imperiosa y tan en secreto un padre cura, confesar de ¨nuestra orden¨.
    -no se nada de eso, replico Aramis .
    -sin embargo, no hace tiempo….
    -es verdad; pero entre nosotros importa que el hombre de hoy olvide lo que hiso lo del hombre de ayer.
    __como quiera que sea,-repuso Baisemeaux,-la visita del confesor jesuita habrá sido grande mente provechosa para ese joven.
    Aramis no replico y se puso a comer y a beber.
    Baisemeaux, lejos de imitar a Herblay, tomo nueva mente la orden y, después de releerla, la examinó por el anverso y por el reverso con la mayor atención.
    Aquel examen, en circunstancias normales habría hecho subir los colores al rostro del poco paciente Aramis; pero el obispo de vannes no se atufaba por tan poco, sobre todo cuando sabía que el atufarse era peligroso.
    __¿vais a liberar Marchiali ?-dijo Herblay.-¡zape! ¡Qué rico jerez, mí querido gobernador!

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  10. 1-Párrafo

    -¿Que pasa?-Pregunto Felipe
    -Amanece Sire
    -¿Que ha pasado?
    -Lo que esperábamos
    -¿Ha resistido?
    -Encarnizadamente; ha llorado
    -¿Y después??
    Ha sobrevivido el estupor.

    2 Párrafo:

    -Uno vuelve del destino, señor de Herblay
    -He dicho aun punto tan lejano, que las fuerzas materiales del hombre y la duración de vida no bastarían para procurar su regreso

    3 Párrafo

    -¿Que haremos de el?
    -¿Del señor del Vallón?
    -Un duque vitalico no es verdad, ¿No es verdad?
    -Si sire,-Respondio Aramis sonriendo de un modo particular.

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  11. Pues la parte que mas me gusto fue - la verdad es -repuso monarca,-que el señor fouquet me a dado una cena mas que buena.pero ¿de donde sacara ese hombre el dinero nesesari para subvenir a tan enormes gastos ?¿lo sabéis vos,colbert?

    -si,sire.
    -Probadmelo.
    -Facilmente,hasta lo ultimo.
    -Ya se que contáis con exactitud.
    -Es la cualidad mejor que pueda exigir a un intendente de hacienda.
    -No todos la poseen.


    -Gracias ,sire,por un elogio tan lisongero para mi en vuestra boca.
    -El señor fouquet esta rico,riquisimo y eso todo el mundo lo sabe.
    -vivos y muertos.
    -¿que queréis decir?
    -los vivos ven la riqueza del señor fouquet,y admiran el resultado,y aplauden;pero los muertos,conocen las causas,y acusan.

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  12. Para mi, la parte que considero mas importante en el libro, fue "El ángel de la muerte".
    - Raul esta muerto, ¿no es verdad, Grimaud?
    Los otros criados del conde con los ojos clavados en el lecho del doliente, escuchaban palpitantes detrás de Grimaud.
    - Si,- respondió el anciano, arrancando de su pecho y con un ronco suspiro aquel monosílabo.
    Al oír la respuesta de Gimaud, los criados prorrumpieron en gemidos y lamentos, suspiros y deprecaciones que llenaron la estancia de aquel padre agonizante. Esto fue como la transición que condujo a Athos a su sueño. Sin proferir una palabra, sin derramar una lagrima, paciente, dulce y resignado como los matieres (materias) , fijo en el cielo los ojos para ver de nuevo en el y remontándose de la montaña de Djiidgeli, la amada aparición que se alejaba de el en el instante en el instante de llegar Gimaud. E indudablemente al mirar hacia el cielo y al reanudar su maravilloso sueño, Athos volvió a pasar por los mismos camilos sobre los cuales le condujera aquella visión a la vez grata y terrible; porque después de haber cerrando suavemente los ojos, los abrió de nuevo y se sonrió respondiendo a la sonrisa que le dirigía Raul.
    Indudablemente Dios quiso abrir a aquel elegido los tesoros de la bienaventuranza eterna a la ora en que los demás hombres tiemblan ante la severa justicia del Señor y se aferran a la vida terrenal de ellos conocida, dominados por el terror que les inspira la otra vida, que entreven a luz tétrica y severas de las antorchas de la muerte. Tras una hora de éxtasis, Athos levanto pausadamente sus blancas manos, imprimió en sus labios una sonrisa y murmuro en voz tan tenue, que apenas fue oída, estas dos palabras dirigidas a Dios o a Raul: "Aquí estoy". Luego sus manos volvieron a caer lentamente como si este las hubiese descansado en el lecho.
    Yo pienso que este relato nos muestra como un padre demuestra que sin la presencia de su hijo en su vida, no seria capaz de seguir, y prefiriendo así la muerte, en la segunda vida se encuentra con su hijo, ya los dos en un solo lugar son felices uno con el otro. Mientras tanto en la tierra sus criados y el buen Grimaud sufren su partida junto también con el señor de D´ Artagnan. La despedida de unos grandes amigos debe ser duro y no me imagino yo en ese estado seria escalofriante con el hecho de solo pensarlo.

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  13. me parese mas importante para mi esta parte

    General De La Orden

    Durante unos instantes ambos guardaron el mayor silencio, durante el cual Aramis
    No perdió de vista al gobernador, que al parecer no estaba muy decidido al
    Interrumpir su cena y que era evidente buscaba una razón cualquier, buena o mala,
    Para retardar el cumplimiento de la orden, a lo menos asta después de los postres.

    ¡ah caramba! exclamo de improviso Baisemeaux, como si hubiera encontrado lo que buscaba,
    No puede ser.

    ¿Que es lo que no, puede ser? pregunto Aramis.

    El dar suelto al presa a esta hora. ¿a donde iras si no conoces París?
    Adonde pueda.

    Ya lo veis, seria lo mismo q libertar a un ciego.
    Ahí fuera me guarda una carroza,y yo me encargo de conducirlo a donde quiera.




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  14. -es éste,-dijo Aramis: - una vez rey…
    -¿Cuánto lo seres?
    -mañana por la noche
    -¿Cómo?
    -os lo diré después me hayáis contestado a lo que voy a deciros
    -leí todas las notas a que os ofrecéis
    -¿atentamente?
    -ya la sede memoria
    -¿la comprendisteis?


    -venid
    -¿adonde?-dijo Porthos
    -¡silencio!-repuso Aramis, todavía maqueado
    -amigo mío –dijo hervían a porthos
    -encended la mecha
    -encended la mecha –repitió el jinete

    -el rey, que ha venido a marchaos forzadas y reventando caballos y se ha anticipado
    Ocho horas ha todos los cálculos
    -¡estamos perdidos!-murmuro fouquet
    -¡ah! Buen d”Artagan has hablado demasiado tarde

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  15. del conde de La Fere , fue a avisar inmediatamente a Planchet. Planchet, dejo su ocupación y acudió apresuradamente, diciendo con verdadera alegría:
    -¡Ah¡ señor conde, ¿Qué buena estrella os trae?
    -mi querido planchet,- repuso athos, -me trae el deseo de saber de vos


    -¿Dónde está el señor d”artagan, que no le han encontrado en el Louvre?
    -ha desaparecido, señor conde
    -¡desaparecido! –exclamo athos con sorpresa
    -ya sabemos lo que esto significa, señor conde


    -bueno exclamo pelisson a su vez, - habéis recibido esta carta, ¿no es así?
    -así es, respondió fouquet
    -¿Qué pensáis hacer?
    -nada, pues la he recibido

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  16. -señor d artagan ¡estáis provocando a vuestro rey !
    -sire….
    -señor D”artagan! ¡ estáis abusando de mi paciencia!
    -al contrario, sire
    -¡como! Al contrario decís ?
    -si, sire: porque e venido para hacer que también arresten a mi.
    -¡para que os arresten a vos!
    -Esta claro mi amigo va a aburrirse en la bastilla; por lo tanto, suplico a vuestra majestad me de licencia para ir a hacerle compañía. Basta que vuestra majestad pronuncie una palabra para que yo me arreste a mi mismo; Yo os respondo de que para eso no tendre necesidad del capitán de guardias. El rey se abalanzo a su bufete y tomo la pluma para dar la orden de aprisionar a D artagan.

    -no olvidéis que es para toda la vida! –exclamo el rey con acento de amenaz.
    -ya lo supongo –repuso el mosquetero; -porque una vez hayais cometido ese abuso, nunca jamas os atreveis a mirarme cara a cara,
    -¡marchaos! –grito el monarca, arrojando con violencia la pluma.
    -no, si os place, sirve
    -¡como que no!
    - he venido para hablar persuasivamente con el rey, y es triste que el rey se halla dejado llevar.

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  17. _!un frondista!
    _que tal caso desde que se acabó la fronda, sire...
    _¿ah? Si lo que decís es cierto...
    _siempre ea cierto lo que digo. Sire.
    _¿a que has venido? Vamos a ver.
    _a decir os a que el señor conde de la fere esta en la bastilla

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  18. -¡ah! ¡mi querido amigo! Perdóname ¡que infeliz soy!
    -¡raul! Dijo Porthos
    -¿estais enojado contra mi?-repuso el vizconde abrazando a Porthos
    -¿yo? ¿Por qué?
    -por haberos olvidado de ese modo. pero ¡ay! Tengo trastornado el juicio.
    -¡bah!
    -¡si supieseis, amigo mio!
    -¿lo habéis matado?
    -¿a quien?
    -a saint-aignan


    -¡ay! No me refiero a saint-aignan
    -¿Qué ocurre?
    -que en la hora es probable que el señor conde la fere este arrestado
    -¡arrestado! ¿Por qué?- exclamo Porthos haciendo un ademan capaz de derribar una pared
    -por d’atargnan
    -no puede ser –dijo el coloso
    -sin embargo, es la pura verdad- replico el vizconde


    -¿y a donde lo han llevado?-pregunto Porthos
    -probablemente la bastilla
    -¿Qué os lo hace creer?
    -por el camino hemos interrogados algunos transeúntes que han visto pasar la carroza, a otros que la han visto entrar en la bastilla

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  19. _¡ha mi querido amigo! Perdonadme, ¡que infeliz soy!
    _¡Raúl !_digo porthos
    _¿yo? ¿porque?
    _por haberos olvidado de ese modo. Pero ¡ay! Tengo transtornado el juicio.
    _¡bah!


    _¡si supieseis, amigo mio!
    _¿lo habéis matado?
    _¿ a quien?
    _a Saint-aignan
    _¡ay! No me refiero a Saint-aignan
    _¿que nas ocurre?

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  20. Ya lo veis, seria lo mismo que libertar a un ciego.

    Hay afuera me gyarda una carroza, y yo me encargo de conducirlo a donde quieraEntretanto la ca rroza al pie de la puerta Ya lo veis, seria lo mismo que libertar a un ciego.
    Hay afuera me gyarda una carroza, y yo me encargo de conducirlo a donde quieradel gobierno
    -¿de acuerdo? Pregunto D' Artagnan en voz de queda

    -¡ha mi querido amigo! Perdonandme,
    ¡Rahul! -digo porthos
    -¿yo por qué?
    - por haberos olvidado de ese modo


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  21. -es este,__ dijo aramis :__una vez rey....
    __¿cuando lo seré?
    ____ mañana por la noche.
    ___¿como?
    ___os lo dire despues que me hayais con testado a lo que voy a deciros. Os envie un hombre fiel para que vos entregaras un cartapacio con notas en la letra menuda y redactadas componen o compondrán vuestro corte
    ____ Ley tdas las notas a la que vos refereis
    ____¿ ATENTAMENTE? la se de memoria

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  22. EL HOMBRE DE L AMASCARA.
    Llega lius 14 al palacio de vaux
    Donde el señor fouquet le recibe con gran aprecio y saluda a su gran amigo d”artagan.
    “Quienes luego los espera una gran cena”
    Ya todos ya la cena en la cena disfrutan viendo platos de todas la calidades y gustos posibles que se puede dar un rey
    ¡Lius 14 quien poco come y mira y mira con recelo al señor fouquet¡
    Después de esta grandiosa Sena recorren el castillo admirado por su gran belleza y sus grandes jardines.

    Pasado algunos días en el castillo o palacio de vaux
    Luis 14 le dijo a d”artagan que vigilara al señor fouquet y que a la mañana siguiente viniera y recibiera nuevas ordenes
    Ya en el cuarto con el señor fouquet
    Conversaron sobre algunas cosas
    Fouquet le dijo d”artagan que si le pedía llamar su gran amigo aramis
    D”artagan le dijo que si no se iba a escapar
    Y el respondió que jamás lo aria
    D”artagan salo a buscar a aramis
    Fouquet mienstrantanto algunos papeles que le podrían implicar en cierto asunto
    D”artagan volvió i dijo que no a bia encontrado aramis

    Al día siguiente aramis muy temprano llego donde fouque donde le comento el gran dios plan quien había ingeniado y ejecutado
    Donde sustituido al rey con su hermano gemelo y había llevado ala vastilla
    Fouque al momento lo reprendió y le dio unos caballos a aramis y potros para que quieran mientras tanto él fue a la bastilla a rescatar al rey lis 14

    Ya otra vez el rey en la el castillo de vaux se enfrentó a su impostor
    Cara a cara los dos se miraban
    Y se pusieron a prueba uno al otro hasta que callo el impostor i fue enviado a una cárcel a una pequeña isla donde se dice que murió. Att: cañon moreno

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  23. al llegar la carroza ante la puerta primera de la bastilla, se parò a intimación de un centinela, pero cuando D'Artagnan hubo dicho dos palabras, levantándose la consigna y la carroza entró y tomo hacia el patio del gobierno.

    D'Artagnan, cuya mirada de lince lo vela todo, aun al través de los muros, exclamó de repente:
    -¿Què veo?
    -¿Que veis, amigo mío?- preguntó athos con tranquilidad.
    -Mirad allá abajo.
    -¿En el patio?
    -Si, pronto
    -veo una carroza, habían traído algún desventurado pero como yo
    -Apostaría que es èl, athos
    -¿Quien?
    -Aramis
    -¡Què! ¿Aramis preso? No puede ser.
    -Yo no os digo que estè preso, pues en la carroza no va nadie más.
    -¿Qué hace aquí, pues?
    -conoce el gobernador Baisemeaux, -repuso athos, -al verme, Aramis se sentirá contrariado, primeramente de verme, y luego de ser visto.

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  24. Al venir por el camino real a aquellos dos jinetes, porthos creyó que eran Saint- Aignan y su padrino. Pero en vez de Saint- Aignan, solo vio a Raúl, el cual se le acercó haciendo desesperados gestos y exclamando:

    -¡Ah! mi querido amigo! perdonadme,¡que infeliz soy!
    -¿Estáis enojado contra mí?- repuso el vizconde abrazando a porthos.
    -¿Yo? ¿por qué?
    -Por haberos olvidado de ese modo. Pero ¡ay! tengo trastornado el juicio.
    -¡Bah!
    -¡Si supieseis, amigo mio!
    -¿Lo habéis matado?
    - ¿A quien?
    - A Saint- Aignan.
    -¡Ay! no me refiero a Saint- Aignan.
    -¿Que más ocurre?
    -Que en la hora es probable que el señor conde de la Fere este arrestado.
    -¡Arrestado! ¿por qué? - exclamó Porthos haciendo un ademán capaz de derribar una pared.
    -Por D'Artagnan.
    -No puede ser- dijo el coloso.

    ATT: LUISA PARRA

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  25. ___ Quiero ver al Gobernador___Repitió el Rey sin pestañear.
    ___¡Cuando! Os hará encerrar en el calabozo.
    ___¡Quiero verlo!¿oís?
    ___¡Ah diantre! ¿se os extravía la mirada? Pues me llevo vuestro cuchillo.


    ___Verdaderamente se parece al Rey, pero no tanto como vos ponderáis.
    ___¿De modo que no os dejarais engañar por la sustitución?___repuso Herblay.
    ___Si, a mí con esas.
    ___No tenéis precio, mi buen amigo. Vamos, ahora soltad a Seldón.
    ___Es verdad, se me había olvidado.
    ___ ¡Bah! Lo soltareis mañana.


    ___¿Luego mentía?
    ___En parte, pero no respecto de vuestro padre.
    ___¿Y mi madre?
    ___Esta muerta para vos.
    ___Pero vive para los demás. ¿no es así?

    ___Si, monseñor.
    ___ ¿Y yo estoy condenado a vivir en la oscuridad de una prisión? ___exclamo el joven mirando de hito a Herblay.
    ___Tal creo, monseñor, ___ respondió Aramis exhalando un suspiro.

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